Superliga europea podría perjudicar a cadenas con derechos de la 'Champions'
Otra de las pujas en el fútbol internacional.
La posible creación de la Superliga, impulsada por algunos de los grandes clubes de fútbol europeos, podría devaluar los derechos de televisión de la Liga de Campeones y aumentar los costos de operadores y cadenas, que se verían obligados a pujar también por la nueva competición.
Según un informe de Barclays, la cuestión clave es si los contratos suscritos por las cadenas de televisión y operadores para retransmitir la Liga de Campeones les permiten devolver los derechos a la UEFA "si la competición pierde doce de sus mejores clubes".
En caso contrario, apunta Barclays, los operadores deberían "pagar una cantidad significativa por la Liga de Campeones y pujar también por la Superliga", lo que resultaría "costoso".
Los derechos de televisión de la Liga de Campeones se reparten de forma diferente según el país. En España, pertenecen a Telefónica hasta 2024, mientras que en Reino Unido están en manos de BT Sport y en Italia, de Sky, Mediaset y Amazon.
El informe plantea también la posibilidad de que los clubes impulsores de la Superliga sean expulsados de las competiciones nacionales.
En ese caso, Barclays apunta que las cadenas en abierto -Atresmedia o Mediaset España- podrían beneficiarse de una eventual pérdida de audiencia del fútbol televisado.
"Si los principales clubes ingleses, españoles e italianos que se han unido a la Superliga no puede jugar en competiciones nacionales y la Superliga no comienza hasta agosto, entonces podría haber ganancias de audiencia en el corto plazo para esas cadenas", ya que las ligas nacionales se retransmiten generalmente a través de plataformas de pago, explica el informe.
No obstante, Barclays admite que este impacto positivo sería "marginal".
Doce grandes clubes europeos (seis ingleses, tres españoles y tres italianos) han confirmado sus planes para crear una nueva competición, la Superliga.
Los clubes fundadores -los doce ya conocidos y otros tres- recibirían un pago inicial de 3.500 millones de euros para financiar sus inversiones y mitigar el impacto de la epidemia de coronavirus.
EFE